Las deudas de las tarjetas de crédito son unas de las principales problemáticas de cualquier persona, sin embargo, las tarjetas pueden ser grandes aliadas. Es probable que, como la mayoría de las personas, tengas alguna deuda pendiente con una tarjeta.
Además, es probable que también sientas gran estrés y ansiedad por esta deuda pendiente. Afortunadamente, hay muchos recursos y estrategias aplicables para ayudarte a lidiar con estos pagos y poder aprovechar las oportunidades que brindan los créditos.
En Estados Unidos se estima que un 3.8 % de la población tienen deudas con su banco de confianza, la estadística está principalmente ligada a jóvenes adultos. Esto tiene sentido, pues son quienes presentan menor conocimiento de finanzas y mayores necesidades para estabilizarse económicamente. Aquí te brindaremos ayuda para liquidar tus deudas y optimizar el uso de tus créditos bancarios.
Las deudas de las tarjetas ¿Un arma de doble filo?
Es probable que las deudas de las tarjetas de crédito que tengamos activas se hayan incrementado desde la crisis económica que significó la pandemia del COVID. Además, vivimos una inflación significativa que dificulta la estabilidad económica, por lo que estamos obligados a hacer uso mayor de un crédito bancario.
El pensamiento común es que los bancos aprovechan los créditos para lucrarse de los usuarios, esta idea no es del todo errónea ni acertada. El principio de un crédito es hacer uso de un dinero que no tenemos, pero que deberemos pagar con intereses. Al hacer los pagos en las fechas pautadas y liquidando deudas totales, podremos aumentar nuestro límite de crédito para usarlo en montos mayores.
En este sentido, la relación con las tarjetas de crédito debería estar más orientada a una herramienta de ayuda que a una carga económica. Claro, esto implica que se ha utilizado de manera inteligente y que se cuenta con el ingreso necesario para cubrir las cuotas.
Sin embargo, no siempre es tan fácil, se nos pueden presentar situaciones donde perdemos un empleo o gastos adicionales. Sea cual sea la variable, las deudas se hacen presentes y liquidar una tarjeta de crédito se convierte en todo un reto. Para esto, también podremos aplicar algunas estrategias de solvencia ante el banco que nos ayudarán a mejorar nuestra economía en créditos.
Combatiendo las deudas de las tarjetas de crédito
Para lograr liquidez ante una deuda de crédito bancario es necesario establecer un plan de acción. En especial cuando no contamos con el dinero o medios para conseguir el monto total, es importante ser constantes con las estrategias de pago. Asumiendo que hemos agotado el recurso de liquidar alguna propiedad de valor para hacer el pago total, aún contamos con otros recursos disponibles.
El paso más importante es reconocer la deuda y no evitarla, además de conocer el monto total a pagar y las opciones que tenemos disponibles. Ante esto, la mejor opción es contactar con nuestro representante bancario y entender el panorama completo de nuestras deudas de las tarjetas de crédito.
Realizar pagos puntuales
Es importantísimo hacer los pagos en los periodos estimados, esto permitirá que nuestra cuenta vaya solventándose progresivamente y que disminuyan los intereses adicionales por demoras. Si contamos con el dinero disponible para hacer un pago mayor al monto mínimo, es el momento de hacerlo.
Recordemos que mientras menos cuotas pendientes tengamos, menos intereses pagaremos. Asimismo, aunque paguemos solo el monto mínimo de la cuota mensual, la deuda será manejable y seguiremos liquidándola a corto plazo.
Limitar el uso de las tarjetas de crédito
Si ya tenemos una deuda pendiente en nuestra tarjeta, la mejor estrategia es evitar seguir aumentándola o creando una deuda nueva. Al establecer nuestros ingresos y deudas de las tarjetas pendientes, identificaremos qué gastos podemos permitirnos sin endeudarnos más de lo que podemos pagar.
Crear un plan de ahorros
Con frecuencia, las deudas por préstamos son consecuencia de una mala administración personal. En este caso, es fundamental destinar nuestro ingreso según nuestros gastos. Es decir, del ingreso mensual que recibamos debemos destinar montos para los gastos fijos, deudas con las tarjetas de crédito y ahorro.
Contar con un ahorro será una gran salvación en momentos de gastos inesperados, crisis financieras y deudas de créditos. Pues, ante una emergencia, tendremos aún dinero con el cual responder ante el banco y evitar deudas mayores. Mantener un buen manejo del dinero no es una tarea sencilla, en la práctica encontraremos un método que nos ayude a lograr nuestros objetivos.
Organizar deudas y pagos
Una estrategia comúnmente aplicada es el conocido efecto bola de nieve, esta consiste en seguir un plan puntual para liquidar deudas. El primer paso será organizar todas las deudas de las tarjetas de crédito y cualquier deuda pendiente en orden de mayor a menor. Teniendo las deudas establecidas, destinaremos un monto mensual para pagarlas, este monto debe respetarse y cumplirse.
Cada mes pagaremos el monto mínimo de cada tarjeta de crédito, exceptuando la deuda menor, en esta pagaremos un poco más del mínimo. De esta manera, iremos saliendo de las deudas que son más pequeñas y quedaremos con las más grandes hasta liquidarlas todas. Finalmente, cualquier dinero extra que tengamos lo usaremos en pagar las deudas, siguiendo de menor a mayor.
De la deuda a la liquidez en las tarjetas de crédito
Como hemos mencionado, una deuda puede generar mucho estrés y con facilidad hacernos sentir abrumados. Lo importante es asumir responsabilidad y buscar medios para solventarla. Liquidar las deudas de las tarjetas de crédito es posible mientras tengamos un plan de acción y seamos consistentes al cumplirlo.
Si necesitas ayuda para liquidar tus deudas de las tarjetas de crédito puedes hacer clic aquí y con gusto te ayudaremos. Pues, las tarjetas de crédito brindan más beneficios que solo un préstamo, los bancos ofrecen puntos para compras, viajes y otros gastos. Sin dejar de mencionar que un buen historial de crédito abre muchas puertas cuando necesitamos ayuda de instituciones financieras.
